¿Buscamos realmente la libertad? O bien, ¿Nos acomodamos a la idea de ser libres?

“Quien en nombre de la libertad renuncia a ser el que tiene q ser, es un suicida en pie. La libertad, como la vida, sólo la merece quien sabe conquistarla todos los días”. Estas son las palabras de Johann W. Goethe. Sin embargo, estas sabias palabras reflejan la libertad que es rechazada y despreciada en muchas ocasiones.

A lo largo de la historia, la libertad ha dado el derecho y la posibilidad de hacer, lo que como individuos se considere correcto. Así mismo, se ha aclarado anteriormente, que la libertad de un hombre termina en los límites de la libertad de los demás (los límites de la libertad que cada individuo posee). Siendo la libertad tan deseada y valorada, sería una tontería el tenerla y no hacer uso de ella.

La sociedad como conjunto de personas, ideas y reglas, es un medio acomodado para desenvolverse. Sin embargo, la sociedad como tal, podría llegar a ser la abolición de todos los ideales de la libertad. Parece una tontería el pensar una cosa como esta. Mas, dentro de la sociedad se pierden (en muchos casos, no en todos) la voluntad y la capacidad de soñar mas allá del medio que rodea al individuo. El ser libre conlleva al conocimiento, la razón y la voluntad. Estas son las características más sobresalientes del ser libre, así mismo, son la razón del desperdicio de la misma en muchos casos.

La cómoda rutina, el establecimiento de prejuicios, y el conjunto de características de la sociedad, otorgan una respuesta a cada acción así como una reacción a cada acción. Son la causa del que muchas personas pierdan su libertad (de escoger, de pensar libremente, de soñar etc.), y que se crean libres mientras son esclavos de la comodidad y de las masas.

Ser libre no significa ser rebelde, ni tampoco ir en contra de comunidad. Pero, ¿somos parte de un grupo, una sociedad por que decidimos serlo? Ó ¿somos parte de un grupo social y no sabemos el por qué?

Por: Sancho